Qué es la autoconfianza y 7 ideas prácticas para mejorarla

Cuando las personas acuden a mí para preguntar técnicas o guías que les ayuden a comenzar a hacer video, a romper con muchos de sus temores usuales al tener una cámara en frente les sugiero que trabajen primero su autoconfianza.

De hecho, suelo realizar cada cierto tiempo un reto llamado Videostar cuyo objetivo primordial es ayudarte a fortalecer la confianza en ti mismo.

Sin ese accesorio esencial puedes tener muchas luces, la mejor cámara, el mejor equipo y aun así tener poca o ninguna conexión con tu audiencia y obtener pobres resultados.

Soy una fiel creyente de que la confianza frente a cámara no es algo innato para todos, es una habilidad que se aprende con ejercicios y práctica.

 

Empecemos por el principio, ¿qué es la autoconfianza?

En palabras sencillas la autoconfianza es la firme convicción de que eres capaz de realizar con éxito alguna tarea, cumplir un objetivo o hacer una buena elección.  Es un estado mental que requiere práctica.

Puedes tener habilidades increíbles o un vasto conocimiento, pero sino confías en ti mismo es muy probable que no consigas ese resultado que quieres alcanzar.

Uno pensaría que una persona competente que ha construido sus capacidades, conocimientos, talentos y habilidades no debe tener problemas con su autoconfianza.  Te sorprenderá saber, o tal vez no, que la falta de confianza en uno mismo es más común de lo que parece.

ATRÉVETE A PINEAR

 

Ante todo, en el mundo de los videos descubro con frecuencia a personas que se petrifican ante la cámara.  Les causa miedo y cuando escarbamos la raíz de dichos miedos muchos de ellos tienen que ver con el temor a fallar, a ser juzgados si se equivocan y a la falta de confianza en ellos mismos.

Si sientes que la autoconfianza es la que te impide avanzar en muchas áreas de tu vida te comparto a continuación 7 ideas prácticas para mejorarla.

 

Cómo se logra la autoconfianza

#1 – TODO EMPIEZA CON TUS PENSAMIENTOS

La manera en la que ves la vida, en la que percibes el mundo afecta el cómo te sientes.  A su vez el cómo te sientes, afecta tu manera de actuar y tu forma habitual de actuar determinará tus resultados.

Te comparto este ejemplo de 2 maravillosas mujeres profesionales, ambas muy bien preparadas en sus respectivas carreras.

Ana se ve a sí misma como una mujer empoderada, ganadora, se siente bien consigo misma.  Suele actuar con confianza, proyecta seguridad ante sus colegas y clientes.  Parece que para ella es fácil ganar nuevos contratos, clientes o cuentas; o la consideran cada vez que hay promociones en la organización.

En el polo opuesto está Claudia, tiene enormes conocimientos y gran experiencia, pero se ve a sí misma como alguien con pocas credenciales.  Esto está en la mente de ella porque la realidad es que sí las tiene. Incluso está mejor preparada que otras colegas.  Sin embargo, a esta altura te debes figurar que sus resultados suelen ser opuestos a los de Ana.

La gran diferencia entre ambas es la manera en la que piensan sobre sí mismas. Una se enfoca en sus fortalezas, lo que tiene a su favor, lo que ha cultivado y la otra en sus debilidades, lo que siente que le falta o lo que ve más en otros cuando se compara.  Una recarga con frecuencia su autoconfianza y la otra la mina.

Revisa tus pensamientos sobre ti misma.  Sé honesta.  ¿Cómo te ves?  Del 1 al 10, donde 10 es sobresaliente y 1 es muy deficiente, como te autoevalúas realmente a nivel profesional y personal.  Te ves y sientes como una ganadora o continuamente tienes dudas sobre tu desempeño.

Si la imagen mental que tienes de ti es pobre o baja y no está alineada con la realidad puedes apoyarte con la sugerencia #2.

 

#2 – PRACTICA POSES DE PODER Y BUENAS POSTURAS

Si tienes alguna duda al respecto te recomiendo que veas el Ted Talk de Amy Cuddy sobre la fuerza del lenguaje corporal en tu desempeño y niveles de autoconfianza.

Practica algunas poses de poder antes de empezar el día.  Esto puede ser parte de tu ritual matutino para que el cuerpo envíe un mensaje positivo a tu cerebro y los neurotransmisores liberen sustancias que actúen a tu favor.

Cuida tu postura.  Piensa en las personas que te inspiran confianza, cómo se mueven, cómo se manejan, cómo se comunican.  Una persona que confía en sí misma ocupa espacio, se hace sentir, se deja ver, proyecta seguridad.

Que tu cuerpo te ayude y le diga a tu cerebro me siento bien, confío en ti y vamos por todo.

 

#3 – SAL DE TU ZONA DE CONFORT Y HAZTE MÁS VISIBLE

En zona segura no hay crecimiento.  Debes arriesgarte más, salir, crecer.

Si tu nivel de participación en general es bajo, auméntalo.  Ya sea en el trabajo o en el plano personal debes estar dispuesto a manifestar con más firmeza tu opinión, tus ideas, tus propuestas o tus comentarios.  Hazte sentir.

Participa y mejora tu visibilidad.  Deja de mantenerte al margen o con bajo perfil.  Una cosa es ser una persona reservada que ama su privacidad y otra es ser invisible.

En el mundo actual quien tiene la atención tiene la posibilidad de influenciar o vender.

En el caso puntual de los videos atrévete a dar el paso y grabar ese primer Reel o efectúa una sesión en vivo (Live) con algún invitado para que te sientas acompañada.  Como dice una frase, hazlo con miedo, pero hazlo.

 

#4 – NO BASTA CON SERLO, HAY QUE PARECERLO

Así como dice la famosa frase sobre la mujer del Cesar.  Puedes tener las mejores competencias o dar los mejores resultados, pero si no luces como una persona confiable no te lo van a comprar.

La apariencia física no lo es todo, pero es parte del conjunto, de tu paquete, de tu marca. Si ya tienes habilidades o capacidades que te hacen apta para una determinada empresa asegúrate de que tu imagen esté en línea con eso que quieres comunicar .

El espíritu de este punto es transmitirte que es importante que te vistas y arregles de una manera congruente con tu canal, tu mensaje, tu personalidad y tu audiencia.  Además si te ves mejor es más probable que te sientas mejor.  Haz la prueba.

La ropa o los accesorios no van a hacer el trabajo por ti, pero sí a darte un buen marco, o punto de apoyo para que puedas tener una proyección ganadora.

 

#5 – CUMPLE LAS PROMESAS QUE TE HACES A TI MISMA

Si hay algo que resta autoconfianza es el incumplirte promesas a ti misma.  Hacerlo, es decirte una y otra vez que no eres confiable en lo absoluto si ni siquiera puedes cumplir un compromiso importante contigo.

Es preferible no hacerte promesas, si no tienes realmente el propósito de cumplirlas, que decir “lo voy a hacer”, solo por compromiso para luego claudicar o peor aún, ni siquiera empezar.

Todo comienza contigo.  La primera persona a quien debes honrarle las promesas es a ti.  Si te fallas tu subconsciente lo traduce como no eres confiable y eso se proyecta en todas tus interacciones con otras personas.

 

#6 – ÁMATE Y APRÉCIATE CADA DÍA

Una dosis de amor propio a diario es una buena medicina para multiplicar la autoconfianza y la autoestima.

Cada día busca formas de mostrarte aprecio tal y como estás dispuesto a hacerlo por un buen amigo o un ser querido.

Expresa cosas buenas sobre ti, deja de ofenderte y criticarte y al contrario piensa en 3 cosas que has hecho bien durante el día y felicítate por ello. Practica afirmaciones positivas, date un piropo, o consiéntete con algo que deseas.

Resalta tus capacidades, talentos y fortalezas.  Envíate una nota o un audio de felicitación de forma periódica por algo que hayas hecho muy bien.  Perdónate con facilidad tus equivocaciones o errores y practica la autocompasión contigo.

Cuida tu salud integral y valora tu cuerpo, las funciones vitales que cumple por ti.

Goza y disfruta de quien tú eres.  Si hay un pilar de la autoconfianza es el amor por ti mismo pues si te amas eres capaz de ver y resaltar todo lo bueno que tienes y utilizarlo como plataforma para seguir creciendo y aprendiendo.

Las fallas son inherentes al hecho de ser humanos, lo importante es aprender de ellas, evitar repetirlas y apalancarte en estas experiencias para seguir creciendo.

 

#7 – PROCURA RODEARTE DE PERSONAS CONFIABLES

Lo bueno se contagia.  Si quieres potenciar y multiplicar tu autoconfianza, procura pasar más tiempo con personas que consideras que tienen esta cualidad.

Así además de que van a ser una fuente de inspiración para ti, estarás expuesto a que esta autoconfianza se te pegue.

Podrás aprender de ellos, conocer sus rutinas o rituales, su manera de pensar y hablar.

Y si tienes una buena relación con estas personas, pídeles que te compartan algunas recomendaciones de cómo han hecho ellos para elevar su autoconfianza.

 

Ya lo sabes

Antes de darle rec a tu cámara asegúrate que llevas contigo el accesorio personal más importante, tu autoconfianza.  Si te sientes bien contigo te aseguró que fluirás y podrás comunicar con naturalidad y carisma tu historia o las bondades de tu producto o emprendimiento.

Y si pensaste, carisma… no todos tienen.  Hummm ese es otro tema sobre el que te contaré muy pronto en este blog.

Por supuesto, hay otros ingredientes clave para la comunicación audiovisual y el videomarketing que te comparto en mis redes y en este blog.  Si quieres más orientación con esto, te invito a seguirme.  También puedes explorar más sobre mi programa 3, 2, 1 en acción.

Atrévete a confiar en ti y visibilizar tu marca.  Estoy lista para acompañarte.